
Al paracer no habia otra opcion mas que dejarte salir por la misma puerta por la que entraste ese dia y me dijiste buenos dias.
Vete, pero no te lleves nada de lo que me diste; déjame recordarte en la intranquilidad de mi ironias.
Te extraño mas que nunca y se que ya no volveras, entonces me que solo una cosa por decirte; muerete!